Las personas usuarias con las que trabajamos en Acufade nos brindan a diario vivencias que son muy enriquecedoras culturalmente. Nos enseñan muchísimo de tradiciones y saberes que no están documentados, amén de remedios caseros para ese resfriado que no se te quita, de historias de vida de las que la Wikipedia nunca se hará eco, de épocas de oscuridad y penuria de las que no te hablaron en el colegio, de mascaritas que pedían una perrita o un durito, de deshojar flores para tejer arte, de ¡Viva la Virgen del Carmen! De alegría y ganas de cantar aunque se trabajara de sol a sol en la empaquetadora, los invernaderos o la sorriba; de jóvenes que montaban un baile con apenas una pandereta y
una bandurria, de recetas que saben a sencillez y a maravilla y de.. mil cosas más.

Podría seguir y todo lo que nos han enseñado no cabría en esta página. Pero lo que quiero destacar es esa huella que nos marca profundamente: sus valores. El ejemplo que nos den. En particular hay una persona que nos ha dejado una enseñanza de vida por su cariño, su fortaleza y su manera de vivir. Y una frase para la posteridad: hoy estamos aquí y esta fruta que estamos saboreando ahora puede ser la última cosecha.

Gracias con todo nuestro cariño y por enseñarnos la importancia de vivir el aquí y el ahora.